Caldo de piedra, una deliciosa tradición prehispánica
El estado de Oaxaca, en México, es un lugar que oculta un montón de tradiciones pertenecientes a las etnias indígenas que todavía habitan en la región. Una de las más antiguas se lleva a cabo en la región montañosa del lugar, entre las rocas que la resguardan y forman parte de la Sierra Madre; una de las cadenas montañosas más extensas de América. Se trata del caldo de piedra, un platillo delicioso que data de más de 5000 años de antigüedad y representa uno de los secretos prehispánicos más valorados por su gente.
Algo curioso acerca de esta peculiar sopa es que, según la tradición, solamente puede ser preparada por hombres, quienes se reparten entre ellos las tareas de buscar la leña para calentarla, ir a pescar, cortar las verduras y seleccionar las mejores piedras. Sí, el caldo este se prepara con rocas; las cuales al cocerse le brindan un sabor muy peculiar.
La receta del caldo estipula que debe prepararse en las cuencas del río Papaloapan, en donde existen enormes piedras excavadas que sirven perfectamente como ellas para su preparación. El uso de ingredientes locales y el terreno pedregoso, han covertido este platillo en uno de los más importantes de la región, así como milenario. En cada cocimiento deben agregarse una o dos rocas de buen tamaño apenas el agua comience a hervir. Esto se hace para que el calor se conserve y la sopa esté caliente por más tiempo.
Los ingredientes que la componen incluyen camarones, pescado, jícaras, verduras crudas y chiles, ¡una auténtica exquisitez!
Cabe mencionar que Oaxaca es el único estado de México en donde se puede disfrutar del caldo de piedra. Si bien todos los estados del país cuentan con platillos típicos, este es uno de los más ancestrales y peculiares en el país. Que delicia.