¿Qué son los sistemas solares pasivos?
¿Has escuchado hablar alguna de los sistemas solares pasivos? Estos, constituyen una forma muy interesante de almacenar la luz del sol con el fin de aprovecharla al igual que lo hacen los paneles solares. Son también una manera muy especial y ecológica de recurrir a esta fuente renovable de energía, en vez de optar por las convencionales que tanto daño le pueden hacer al Medio Ambiente. En el artículo que traemos en esta ocasión para ti, te hablamos acerca de ellos con lujo de detalles y te mostramos lo que los transforma en una gran alternativa. ¿Te lo vas a perder?
¿Qué son los sistemas solares pasivos y cómo funcionan?
Son sistemas que funcionan a base de superficies vidriadas, en las que acumulan el calor del sol. Cada una de estas superficies tiene una orientación especial, en función de las necesidades del lugar en donde se encuentren. La razón por la cual se los llama pasivos, es que no necesitan de la ayuda de otros dispositivos, como los ventiladores o las bombas de calor, al trabajar con la luz que recolectan.
Hacen todo por sí mismos y utilizando principios tan básicos de la física, como los de la convección y la radiación del calor.
Tipos de sistemas solares pasivos
Existen seis clases de estos mecanismos y son los que te describimos a continuación.
- Muro de acumulación no ventilado. Se trata de un muro que puede ser construido con diferentes materiales, que van desde el ladrillo hasta el hormigón. Incluso puede formarse con agua. Es pintado completamente de negro en la parte que da hacia el exterior, pues es un color que reacciona mejor con el calor del sol. Frente a él se coloca un vidrio que al ser atravesado por los rayos solares, conduce el calor hasta la pared para calentarla y conseguir radiación infrarroja, la cual se acumula en el vidrio. Se le conoce también bajo el nombre de Muro Trombe.
- Muro de acumulación ventilado. Similar al anterior, excepto que cuenta con huecos tanto en la parte inferior como en la superior. Esto provoca que haya una transferencia de temperatura entre la pared y el vidrio, creando el efecto de convección, el cual es muy útil al combinarse con la radiación para aprovechar mejor los rayos del sol.
- De ganancia directa. Se caracteriza por usar varios vidrios, colocados estratégicamente según el sitio en donde se vayan a utilizar. Es el sistema pasivo más sencillo de todos los que hay y tal y como su nombre lo indica, se aprovecha de la luz que proviene del sol de una manera directa, que en sí no crea efectos complicados como los anteriores.
- Techo de acumulación de calor. También llamado estanque solar. Consiste en poner vidrios sobre los tejados para guardar el calor de los rayos solares. A este sistema se le suelen agregar dispositivos para impedir que durante las noches, la luz acumulada no pueda escaparse con facilidad.
- De captación solar y acumulación de calor. Es el sistema más complejo de todos los que hay, ya que combina el de ganancia directa a través de ventanas, con conductores solares que pueden funcionar a través de agua o de aire. Estos conductores guían la luz hacia debajo del piso con el objetivo de almacenarla allí. Una ventaja que tienen es que a la inversa, pueden utilizarse como refrescadores pasivos.
- Invernadero adosado. Es una construcción formada por muros y techos de vidrio, por los cuales la luz del sol puede pasar libremente. A veces tienen muros de separación por si están anexados a construcciones tradicionales. Los cambios de temperatura en su interior pueden ser muy frecuentes.